martes, agosto 14, 2007

La herencia de San Fernando

Parte del engaño es tener a todos contentos, o si no a todos, si a los que les podrían cuasar algún “malestar institucional”. O simplemente era el deseo de “compartir”. De esto muchos de los profesores y ex directivos se han de acordar muy bien.

Pues para los que no saben déjenos contarles y prevenirles que en la quinta San Fernando se decidieron muchas situaciones entre alumnos, grupos y directivos.
Era el lugar acogedor, embriagador y absolutamente acorde para ver los problemas y tomar decisiones que les permitieran seguir discutiendo en ese lugar y con la misma armonía de siempre, con el siempre grato olor a alcohol y engaño.

San Fernando se convirtió de un tiempo hasta hace un año en el centro de reuniones de alumnos con directivos, hoy lo sigue siendo pero muy disminuidamente, solo los reacios que no están dispuestos a progresar lo siguen utilizando como manera de proteger algún cargo, complaciendo a los que podrían en algún momento quejarse
Pues era cotidiano, durante la administración del ing. Nathanael Flores encontrar a jóvenes embriagados y a directivos “disparando” la cerveza, poniendo la discada o la carne asada. No vayan a creer que son tan nobles esos hombres, no, era una forma de manipulación estudiantil, donde el directivo hacia que el alumno se comprometiera con ellos, para esto fingían ser amigos y les ofrecían resolver todos los percances académicos que se les presentaran en las aulas.
Además de eso eran comunes los regalos, el desvió de recursos para fiestas particulares, el uso de la camioneta del instituto para uso personal, y a veces obsequios muy grandes como un rebaño de cabras o cerdos…

Todo esto fue lo que llevo a la escuela a estar en un momento de sus historia en un nivel muy bajo, donde los directivos se regocijaban con el presupuesto y entradas del instituto y, por otra parte, los alumnos, que eran la gran mayoría, se tenían que aguantar malos servicios directivos y pésimas condiciones en el andar cotidiano por las aulas.

Por eso debemos saberlo y no caer de nuevo en este ciclo viciado que tanto daño nos hizo, y debemos de estar precavidos, no vaya a ser que “resucite” el ingeniero Nathanael Flores

Pdta: No vayan a San Fernando

0 comentarios: